Cómo crear un zona de estudio perfecta
La vuelta al cole está cerca, y puede que este año tengas que reformar la habitación de tu hijo/a. Si ya se hace mayor, tocará crear una zona de estudio perfecta, para hacer los deberes diarios, estudiar, trabajar… Etc.
Por eso hoy, desde nuestro blog, queremos darte los mejores consejos para crear una zona de estudio perfecta.
Verás que si sigues a rajatabla nuestros consejos, te será fácil y sencillo. No pierdas más el tiempo, y ponte a trabajar en crear una zona de estudio perfecta para tus hijos.
Toma nota:
1- Los colores son importantes
Si, como les pasa a todos los padres, buscas crear una zona de estudio perfecta, donde tus hijos, no solamente estén cómodos, sino que además no se distraigan con facilidad y puedan aprovechar el tiempo mejor, en ese caso, nuestro consejo es que pintes la estancia con colores sobrios.
¡¡OJO!!, No queremos decir con esto, que los colores de paredes tengan que ser aburridos, incluso puedes jugar poniendo detalles de color en la habitación poniendo vinilos que les inspiren y les gusten.
2- La iluminación es fundamental
Cuando empiezas a pensar en crear la zona de estudio perfecta para tus hijos, lo primero que tienes que hacer es potenciar la luz natural. La luz natural es fundamental para decorar cualquier estancia del hogar, y en la habitación de tus hijos, no iba a ser menos.
Trata de ubicar, siempre que puedas, la zona de escritorio junto a la ventana, ya que la luz natural, estimula la producción de endorfinas, no daña a la vista y mejora el rendimiento escolar.
Si es imposible localizar ahí la zona de estudio, entonces tendremos que iluminar dicha zona de la mejor manera posible. En primer lugar debemos saber que lo más adecuado es colocar la lámpara, preferiblemente articulable y orientable, frente a la mano que el niño utiliza para escribir, así no crearemos incómodas sombras.
El tipo de bombilla es también un factor esencial: Es preferible usar luz más blanca y fría porque, al parecerse más a la natural, los ojos trabajan de manera más relajada.
3- Adecua el espacio
Para crear la zona de estudio perfecta, los niños no se tienen que adecuar al espacio, sino el espacio a los niños. Sí, sabemos que es más fácil decirlo que hacerlo, pero siempre has de tener en cuenta ciertos detalles como estos…
Al escoger la mesa de estudio, cuenta con una profundidad de unos 70 centímetros para que pueda estar sentado y tener las piernas cómodamente situadas a la vez que goza de la suficiente profundidad de zona de apoyo. En cuanto al largo, esto depende mucho de los metros de la habitación donde se vaya a poner la zona de estudio, pero si hablamos del largo ideal, no te recomendaremos menos de 130 centímetros.
Consejo: La superficie de la mesa o tablero de trabajo es mejor que sea mate o satinado, ya que si es brillante produce molestos reflejos cuando la luz incide sobre ella y por este motivo les costará más esfuerzo concentrarse apropiadamente.
4- Distribución adecuada de los elementos
En este artículo, buscamos crear la zona de estudio perfecta para nuestros hijos en su vuelta al cole. Por eso, ponemos sobre la mesa, todo lo que “a priori” deberíamos hacer… Luego, claro está, hay muchas cosas que se nos pueden escapar, o no podamos hacer por falta de espacio u otras circunstancias.
Por eso lo ideal, para un distribución adecuada, es separar la zona de estudio de la de descanso. Intenta que desde la mesa no se vea la cama, así impedirás que tus hijos se sientan atraídos por echarse en ella. Conseguirás que se concentren mejor para hacer los deberes o estudiar. Del mismo modo deberías evitar todo aquello que pueda distraer, como fotografías con amigos o pósters de sus famosos favoritos. Pero sin expulsarlos del dormitorio, simplemente se trata de colocarlos alejados de la zona de estudio.
5- Capacidad de almacenaje
Una zona de estudio perfecta, tiene que tener una buena zona de almacenaje para poder guardar todo de manera rápida y sencilla, además de disponer de todas nuestras necesidades al alcance de la mano.
Los niños han de tener bien cerca y a buen recaudo todo lo necesario para llevar a cabo su tarea sin necesidad de levantarse continuamente. De esta manera, evitaremos que abandonen su sitio y se distraigan de su cometido por el camino. Incorpora una cajonera bajo el sobre de la mesa, instala baldas en las que aprovechar la parte superior de la zona de estudio, incluye algún módulo de almacenaje en las inmediaciones de la mesa de estudio. Cualquier cosa con tal de tener accesibles y localizables todos sus enseres y material de apoyo necesarios.
6- Las sillas adecuadas
La silla es uno de esos elementos indispensables, a los que muchos padres no les prestan la atención necesaria. Tenemos que pensar que quizás ahora cuando son más pequeños no, pero más adelante, nuestros hijos van a pasar muchas horas sentados sobre ellas, y por eso debemos cuidar que sean lo más favorables para ellos.
Lo más acertado es elegir una silla con capacidad de ajuste que permita regular la altura, de modo que los pies queden apoyados con firmeza y comodidad en el suelo.
Una de las claves fundamentales es que tenga apoyo lumbar; si éste coincide con la curvatura natural de la columna alivia tensiones musculares en la zona baja de la espalda. Además, lo ideal sería que los reposabrazos pudieran regularse también para no perder el ajuste ergonómico.
En cualquier caso, siempre es recomendable que hagas partícipes a los niños de la decoración y distribución de su espacio de trabajo ya que es un lugar en el que pasarán mucho tiempo, por lo que es totalmente razonable que encaje con sus gustos y necesidades más que con las tuyas. Y por último, si a pesar de nuestros consejos, tienes dudas de cómo hacer una zona de estudio perfecta, pásate por la tienda, y te atenderemos encantadas. ¡¡Os esperamos!!